Llega un nuevo año, dejando atrás lindos aprendizajes, procesos, y logros que casi quedan dejando una vara para superar y satisfacer el ego de la auto exigencia que vive en el interior de todos, y sobre todo en el mío.
Este año comienzo muy reflexiva, con ganas, como cada ciertos ciclos, cuestionarme todo… Con demasiada info en mi cabeza. Nombro algunas:
La exploración con probióticos  en mi casa, cientos de cepas de bacterias en la Cocina Fermentada y explorar en cómo la salud intestinal afecta, según últimos estudios en neurosiquiatría, a nuestro comportamiento mental y emocional. Un mundo en ésta Cocina-Lab, de cómo construyo alimentos que sanan.
Entendiendo que somos seres muy complejos y diferentes unos de otros, que es muy difícil abordar entrenamiento de cambio de hábitos sin una relación muy cercana con las personas, ya que es un todo lo que nos compone…seres emocionales, mentales, físicos, con una historia cada uno y que un todo afecta nuestra mirada sobre la Vida y la relación con lo que comemos. Que la relación Uno a uno es clave, que la apertura del otro y la confianza también. Que los coach online no sirven, hay que tocar, hay que verse a los ojos, hay que sentir los dolores que acompañan en el proceso.
Abriendo mucho la mirada sobre lo que comemos, las diferentes variantes sobre la Nutrición saludable, desde Palmetti, Conesa, Perlmutter, Cussens, Mercola, Graham, Ehret… y varios más…un mundo de miradas que al final sólo queda explorar y sentir en tu propio cuerpo a ver cuál le hace más sentido a tu microbioma y a tu ser completo. Porque la BioIndividualidad es fundamnetal.
Reflexionando sobre el sistema que el hombre actual ha construído, cómo siento cada vez más que la esclavitud no se ha acabado, que el negocio está en No Despertar y en seguir consumiendo lo que las revistas, TV, los medios, los Bancos, quieren que seamos. No cuestionar nada de lo que te venden, creer en las etiquetas y en los photoshop, creer las promesas que buscan votos y creer lo que dice la TV, ahí es negocio redondo.
Explorando cómo el sistema de Salud, no quiere que estemos sanos, que tarjan de inmediato a grandes de la medicina y de la cura del cáncer como Gerson, Caisse, y otros, convirtiéndolos en “charlatanes” para que tú descartes de lleno cualquier planteamiento de éstos grandes sanadores. Porque ellos quieren que creas a la OMS, a la FDA, y a lo que los grandes Laboratorios nos vendan como la Cura de las enfermedades.  Esto me llena de desazón a veces y otras de energía por despertar a otros ya que somos cada uno de nosotros los que podemos cambiar éste planeta. Creo que la gestión de la búsqueda de la Salud parte por cada uno, que el Sistema de Salud no busca mantenerte Sano, la medicina actual ha olvidado sus principios éticos fundamentales que lo sustentan, y hoy nos ven como un cuerpo, compuesto por una suma de órganos. Creo en que se viene la Nueva Medicina, que nacerá por la exigencia de pacientes conscientes e informados.
Me hace cada vez más sentido conectar de verdad con la Madre Tierra, “grounding” le llaman a la terapia de “hacer tierra”, conectar con lo que realmente importa, con la que es nuestro hogar y la que nos sostiene. Comer de la tierra, caminar descalzo, verter nuestro flujo menstrual a la tierra, devolviendo la vida que nos da, agradecerle, abrazar árboles.
El Sol nuestra fuente de Luz, calor y energía de vida. Sungazing le llaman a la terapia de mirarlo, eso es algo a tener muy en cuenta. Dejar de mirar al Sol como nos han enseñado.., a temerle, a bloquearnos contra él colocándonos una película de químicos en la piel para que el Sol no haga su tarea hermosa de sintetizar la Vit D y mantenernos sanos.
Agradezco a mi refugio que he construido en la práctica del Yoga, es mi ancla, es mi disfrute conmigo misma, como una danza amorosa.., a veces casi en éxtasis, y otras, en la lucha con mis propias sombras. Esas sombras a las cuales cuesta mirar de frente, y que el yoga me hace enfrentarlas amorosamente. Es un camino sin fin.
Llego al 2017 reflexionando y agradeciendo, mirando el camino recorrido, un camino hermoso, disfrutando de la familia que me acompaña y que a veces me mira como bicho raro por mis ideas, pero sé que disfrutan y me quieren así. Ellos son un ancla, mi Tauro, si no mi exploración sería más radical, mi Sagitario me llevaría lejos.
Estoy sin Expectativas de lo que se viene, sólo fluir, agradecer y pedirle al Universo y al Sol que me ilumine siempre e ilumine las conciencias de quienes leen éste artículo.
Muchas de éstas exploraciones comenzaré a subir al blog.