kukkutasana11.jpgQuién realiza alguna practica o disciplina fí­sica como el yoga, se enfrenta a la maravillosa verdad de entender al cuerpo como un vehi­culo, aca un texto maravilloso de Sai Baba:
” Aquel que esta inmerso en la conciencia del cuerpo es presa de todo tipo de problemas y preocupaciones, deben comprender que el cuerpo es óolo un instrumento y esta propenso a perecer en algún momento. Si la muerte sigue al nacimiento, ¿por qué preocuparse por ello?
…El cuerpo es el Templo del Alma Individual (jiva); de este modo, cualquier cosa que suceda en ese templo concierne al Alma Individual. Asi­ también, el mundo es el cuerpo de Dios y todo lo que suceda en él, bueno o malo, le concierne a él. Del hecho observado del Alma Individual y del cuerpo, conozcan la Verdad del hecho inobservado de Dios y el mundo.”

…El cuerpo del hombre es un Templo donde Dios esta instalado.
Imagen: Ashtangabook by Petri Raisanen

“El cuerpo, los sentidos, la mente y el intelecto solo son vestiduras asumidas por el hombre . Solo cuando comprendamos su naturaleza y significado podremos utilizarlos con propiedad…El cuerpo, formado de los cinco elementos es impermanente, pero ustedes, que han asumido este cuerpo, son en verdad Dios supremo, que es eterno e inalterable. Por lo tanto, a ustedes les corresponde usar el poder del discernimiento para usar el cuerpo sabiamente.”
Swami Sai Baba
La palabra sarira es otro de los nombres para denominar al cuerpo ”Aquello que se deteriora se llama sarira” En el momento del nacimiento, el cuerpo es solo carne y sangre. Al crecer embellece y entra en la etapa adolescente y adulta, cuando se inflama su orgullo debido a su belleza y vigor. A su debido tiempo es vi­ctima de los estragos que causa la vejez, con la consecuente prdida de vitalidad y, por ende, es susceptible a las enfermedades. De este modo esta el cuerpo sujeto a muchos cambios
Otra palabra para designar al cuerpo es mandir, templo o altar, porque abriga al alma individual que de hecho no es sino el alma suprema o Dios eterno. Por lo tanto, al ser el cuerpo la sagrada morada de Dios, no debe usarse para hacer el mal sino para albergar buenos pensamientos, hablar buenas palabras y realizar buenas acciones. Para facilitar ese uso correcto del cuerpo, éste debe mantenerse en buenas condiciones y asi­ obtener felicidad de él.
El cuerpo posee cinco envolturas que esconden al Alma. Estas se agrupan bajo tres categori­as: la densa, la sutil y la causal. La envoltura fi­sica (carne, sangre, huesos, etcétera) y la vital (el aliento) conforman el cuerpo denso. Cuando estas dos se desprenden o desintegran, tambin el cuerpo cae y no se puede levantar mas.