En la vida todo está relacionado, nuestro cuerpo, con nuestra mente, con nuestro espíritu, con nuestro hogar y con nuestro planeta. Esa mirada de totalidad es la que nos hace pensar que al abordar de manera consciente la limpieza de cualquiera de éstos aspectos de nosotros, ayuda a la limpieza de los demás. En la medida en que nuestra forma de vida sea lo más sana posible, tendremos una mente más sana, un hogar más sano y la conciencia de querer una sociedad y un planeta más sano.
Partiendo por el cuerpo, podríamos referirnos a lograr mirar a la comida más que como un placer de la boca, como un alimento para el cuerpo. Que mientras menos procesos haya recibido esa comida al llegar a mi boca, es más benéfica para mi cuerpo.
En lo que se refiere a la Mente, el yoga ha sido una práctica que me ha acompañado por muchos años, ella me ha enseñado que la respiración y nuestro sistema nervioso están absolutamente comunicados, que en la medida que educas tu manera de respirar, vas ordenando tu sistema nervioso y por lo tanto la forma en cómo ves tu vida. La práctica física de Posturas corporales sólo tiene como finalidad limpiar el cuerpo, mantenerlo ágil y sano, que como vehículo funcione a la mayor perfección posible.
Siguiendo con la mirada de un cuerpo mayor que nos contiene, éste es nuestro “hogar” y debemos tener la mirada de entenderlo como nuestro “refugio”, nuestro Templo, el que nos recibe, acogiéndonos al final del día, cobijándo la intimidad más profunda que ocurre con los lazos afectivos que componen la familia, es el lugar que debiera ser el espacio donde nos “cargamos”, para ello como herramienta que existe es el Feng Shui. En un inicio aplicado de manera muy intuitiva como cambiar muebles para sentirnos más cómodos, pero en una profundidad, hay sintonía con el cosmos, con la orientación magnética terrestre, tal como los Chinos lo experimentaron hace ya más de 3.000 años.
Un ejemplo sencillo es el Dormitorio, ahí pasamos alrededor de un tercio de nuestra vida, cifra que le otorga al dormitorio ser el espacio más importante para nosotros. Es aquí donde descansamos y nos cargamos para enfrentar un nuevo día. Por ésto mismo, debe ser un espacio armonioso y relajante, capaz de energizar por la mañana y calmar por la noche. Es el ambiente Yin de la casa, o sea, el lugar donde ocurre la introspección, el sueño, y la oscuridad. Es importante que sea un espacio ventilado y que ojalá reciba la suave luz de la mañana, y se mantenga en el frescor de la penumbra el resto del día con su naturaleza Yin. En un buen Feng Shui cada rincón refleja la clara intención de amor, curación y relajación.
El trabajo parte por casa, parte por querer un cuerpo más sano, una mente más clara y un espíritu más conectado con la Existencia y cómo ésto lo irradiamos al mundo, dando como resultado una conciencia de los “otros” y del planeta que me recibe.
Mi blog es el punto de partida, es el aporte que me interesa como plataforma de conversación y es para que otros me aporten también .
Escuché por primera vez hablar de blogs en Abril del 2005 a Fernando Flores en un Diploma que hice de “Identidad a través del blog”, que tuvimos en Santiago, luego de eso decidÍ abrir mi propio blog y aportar abrazando y haciéndome cargo una serie de preocupaciones que movían mi vida hasta hace unos años y que me interesa compartir desde aquí, Concepción, en mi región del Biobio en Chile.